Muchos conocen la calle de Santiago en Semana Santa cuando se acercan a la Iglesia del mismo nombre para ver la salida del Rocío. Habrán pasado junto al gran portón del corral del Conde y, al llegar a la plaza de Ntro. P. Jesús de la Redención, se habrán sorprendido por la amplia fachada de ladrillo vitolado de la casa del marqués de Villapanés sobre la que se levanta un mirador.
Este bello edificio lo mandó construir en torno a 1729 el almirante Manuel López-Almonacid Pintado (1677-1745), nombrado por Felipe V marqués de Torreblanca del Aljarafe. El edificio, según Teodoro Falcón, se debe al arquitecto Diego Antonio Díaz (1667-1748), maestro mayor de la catedral y del arzobispado, autor de la iglesia del convento de Santa Rosalía, de la portada de acceso interior a la iglesia de San Antonio Abad (El Silencio) y de la portada principal de la iglesia parroquial de Ntra. Sra. de Consolación de Umbrete.
Tras el zaguán, una hermosa cancela de triple arcada, fechada en 1852, imita a la de la casa de los Condes de Casa Galindo en el Museo, ésta de 1842. El patio lo forma una galería de arcos y lo preside una fuente con un niño con un pez. Al fondo se accede al jardín y a la derecha a un pequeño patio con una fuente de grutescos.
En la escalera principal está el blasón de los Solano, por la mujer del almirante, con el lema Fueron con sol y vinieron los que a los moros vencieron. La bóveda se decora con yeserías con ángeles en las esquinas.
La casa adquiere el nombre de Villapanés con su octavo marqués, Juan Antonio Duque de Estrada y Cabeza de Vaca, VIII Marqués de Casa Estrada y V Marqués de Torre Blanca de Aljarafe. Actualmente es el Hotel Alma Sevilla – Palacio de Villapanés