Uno de los más imponentes edificios del siglo XVII de los que se conservan en Sevilla es el situado en el flanco sur de la plaza del Cristo de Burgos. En uno de sus extremos se yergue su gran mirador que, hasta hace no demasiados años, se mantenía abierto y conservaba su función original: mirar al exterior.
Como en muchas casas de Sevilla, en su trasera se encontraba un jardín, ya desaparecido, como casi todos en Sevilla. Traigo aquí la foto y el dibujo que aparece de él en el decisivo libro «Arquitectura Civil Sevillana» de Francisco Collantes de Terán y Luis Gómez Estern.
Podemos compararlo con los que se conservan de la casa de Villapanés y de los Levíes (en la casa de los Pinelo, actualmente).
Edición, diseño, maquetación y servicios editoriales